No desconocido a cualquier vecino de nuestra sociedad, tanto de la Capital Cordobesa, como regiones del interior provincial, y por supuesto en gran parte del Territorio de Nuestra Argentina , la FORMA INTENCIONALMENTE INCORRECTA, INCONSIDERADA  Y SOEZ, en la que Los Gobernantes, las Autoridades que  hemos elegido con el voto, y las que estos disponen  en el poder unilateralmente, con el objetivo de conducir, disponer y reglamentar nuestra forma de vida y de cómo conducirnos entre la comunidad,  vienen manejando  y manoseando CONCEPTOS DE DERECHOS HUMANOS DE LOS CIUDADANOS DE BIEN , respetuosos del prójimo, de las normas y las reglas impuestas; y de SUS PROPIAS OBLIGACIONES COMO ESTADO. La vulneración a la vida, libertad de andar y disfrutar en espacios al aire libre, a transitar con tranquilidad , a reunirnos con familiares o amigos y regresar a casa sano e íntegro, se ha vuelto una triste estadística negativa y plato diario de rutina en noticieros ,  informativos, y en las conversaciones entre vecinos.

Los Derechos Humanos civiles y políticos que le corresponden a las personas, solo por existir, como la vida, el tránsito, la expresión, reunión, etc., está protegido  y conceptuado en beneficio de las personas  en  LA CONST: NACIONAL ART:14 y el PACTO DERECHOS CIVILES Y POLITICOS con el mismo grado constitucional.  Muchos políticos dirán que en esos derechos, basta con que el ESTADO, LOS GOBERNANTES, no interfieran en su realización, pero nada está más alejado de la realidad, verdad, y su deber de Obligación, PUES CUALQUIER OMISION del ESTADO para que estos derechos se conduzcan en un normal y propio desenvolvimiento, es una falta, una violación a los DD.HH de las personas a las que gobiernan.

Los DD.HH si bien se separan en categorías, LA UNION, LA INDIVISIBILIDAD E INTERDEPENDENCIA que ostentan, IMPONEN AL ESTADO a realizar esfuerzos, gastos, y acciones  exhaustivas para protegerlos y lograr una realización natural y tranquila, PRIMERAMENTE, ENTRE LAS PERSONAS QUE RESPETAN LAS NORMAS SOCIALES, CIVILES, PENALES Y MORALES, luego deben velar y concentrarse en hacer respetar derechos a  VICTIMARIOS, DELINCUENTES, Y SUS PARTICIPANTES NECESARIOS. Esa debería ser la esencia primordial de nuestro Gobernante en Córdoba, de Nuestros Legisladores y las Autoridades políticas que ostentan facultades para representarnos y generar en factibles la satisfacción y protección de nuestras necesidades.

Desde esta asociación Civil de DD.HH y Género, llamamos a la concientización, en general de otras  ONG que despierten de subyugarse bajo el discurso de LO POLÍTICAMENTE CORRECTO, del mejor NO METERSE PORQUE NOS VAN A ESCRACHAR, etc. hagamos informes, exijamos a los Organismos Provinciales, Nacionales e Internacionales que se autoproclaman defensores de los DDHH, que acá ESTAMOS SUFRIENDO VULNERACIONES CON INTERVENCIÓN NEGATIVA DEL ESTADO, que los delincuentes, los malvivientes, los inmorales nos avasallan, nos quitan la vida, a nuestros seres queridos, a nuestra paz, tranquilidad individual , familiar y  grupal. Debemos EXIGIR UN LIMITE, QUE RESPETEN A QUIENES RESPETAMOS y luego de asegurar estos derechos, de hacerlos prevalecer, y de que se empiecen a aprovechar por los inocentes, velaremos para que los victimarios disfruten de los suyos. Estas políticas paupérrimas, vergonzosas por parte del Gobernador, los intendentes, y los que vienen empujando para ocupar cargos, prometiendo SOLUCIONAR lo que ahora no CONTRIBUYEN A SOLUCIONAR. BASTA de COPIAR y TRAER acciones o probanzas que hicieron en otros lugares  y tratar de meterla a nuestra sociedad como panacea irreflexiva de seguridad, basta de inutilidad, de desmanejos, de poner cargos convenientes políticamente, pero que desconoce la labor social de seguridad civil. Solo les importa hacer obras para mostrar y con las que logran recaudar dineros  disimulando gastos, porque proteger la vida, la seguridad, la libre reunión, eso no lo pueden fotografiar ni cortar cintas, mucho menos disimular en el gasto financiero. DIGAMOS BASTA A QUE VIOLENTEN NUESTROS DD.HH. UNÁMONOS Y EXIJAMOS RESPETO POR EL BIEN COMÚN