En un incidente que generó gran controversia, pero que no es nuevo, una oficial de policía fue sorprendida consumiendo drogas en el baño de una estación de servicio mientras patrullaba en el barrio Maipú de Córdoba. El episodio ocurrió en la madrugada del martes y fue revelado oficialmente este miércoles por la mañana.
Cuando hablamos de que esto no es nada que pueda sorprender, es porque ya los hechos que vienen pasando dentro de la fuerza policial, han convertido a la policía en la maldita policía que se denominó alguna vez.
La raíz del problema viene desde hace muchos años, cuando la política se metió dentro de la fuerza, introduciendo mediante tráfico de influencias, personas con antecedentes, adicciones; etc, y favoreciendo a punteros de la política, hijos y parientes de jefes y políticos, convirtiendo una honorable fuerza de seguridad, en un antro de corrupción.
En este ultimo caso, pero no el único, ya que ha habido muchísimas denuncias de personal, que no han querido participar en ciertos eventos donde corre la droga, y se arman fiestas clandestinas, donde hay sexo, droga y participan hasta comisarios, los cuales son los mismos que hacen abuso de autoridad y maltratan permanentemente al personal, claro a los que trabajan y no se prestan para lo que viene pasando.
CORDOBA: DESCUBRIERON A UNA POLICIA CONSUMIENDO COCAINA MIENTRAS PATRULLABA.
El hecho causo conmoción y todos se volvieron opinologos y expertos en la materia del consumo, además la familia de Salas salió a tratar de dar explicaciones, la cuales no alcanzan cuando quien es adicto maneja un arma, el hermano tardíamente, explicó que su hermana intentó buscar asistencia médica en varias ocasiones, consulto a una psicóloga, recibiendo la recomendación de internarse, según siempre manifestaciones del familiar, que ella fue al Morra, habló con una psicóloga, le dijeron que debía internarse, aduciendo ella en ese momento, ‘mira, si yo me interno pierdo el trabajo, porque lamentablemente la Policía me va a dar de baja’, si bien puede ser un justificativo entendible, no alcanza, porque es una persona que al consumir droga, se vuelve potencialmente peligrosa, para propios y ajenos.
EL GRAVE EFECTO QUE PRODUCE LA COCAINA, HAY QUE PONER URGENTE EL FOCO EN LAS FUERZAS DE SEGURIDAD.
Los efectos psicológicosde la cocaína pueden incluir, por un lado, un aumento de la ansiedad y de la euforia, de la capacidad motora, de la verborrea, de la sociabilidad, de la percepción de energía y de la claridad mental. Por otro lado, implica una disminución del apetito, del sueño y también puede inhibir determinadas conductas, aumenta la sensación de fatiga y cansancio e irritabilidad. También pueden aparecer náuseas, vómitos, y dolores musculares.
Los efectos físicos de la cocaína incluyen aumento del ritmo cardiaco, taquicardias, palpitaciones, aumento de la presión arterial, hipertensión arterial, dilatación de las pupilas y temblores, tensión mandibular y bruxismo, problemas respiratorios agudos, aumento de la temperatura corporal y sudoración excesiva.
A todo esto, hay que sumarle, la presión, el estrés de cumplir una función con un arma como herramienta de trabajo y además los problemas personales. Pero es innegable que Salas tiene una responsabilidad directa ya que sabiendo todo la que ya hemos expuesto, no quiso tomar conciencia de la gravedad de sus acciones y en definitiva termina fuera de la policía.
LAS MEDIDAS DE UN MINISTRO DE SEGURIDAD QUE NO ALCANZAN.
El primero de agosto de del 2024 el Ministerio de Seguridad, dispuso la implementación del narcostest en la policía, mediante resolución ministerial, se estableció la implementación de un «Protocolo de Control de Drogas para el Personal de la Policía de la Provincia de Córdoba», con el fin de garantizar la seguridad pública y mantener la integridad y profesionalismo de la fuerza policial.
Se implementa a través de la Dirección General de Control de Conducta Policial de Córdoba, con testeos aleatorios y por sospecha razonable al personal de los distintos cuerpos de la Policía, a todos los ingresantes de la fuerza y de manera obligatoria para aquellos efectivos que estén en condiciones de ascender a jerarquía superior.
Ahora viene la pregunta, que paso que nunca se utilizó esta medida tan promocionada, o una vez más es ¿solo márquetin?, si bien el Ministro Quinteros salió a decir, que no lo pueden hacer cargo por los test no realizados, ya que tiene una fuerza efectiva de 22 mil policías y 16 mil en la calle, le decimos miente, primero que no llegan a los diez mil los que se encuentran activos patrullando (que tendrían que ser los primeros ya que son los que están en contacto directo con la ciudadanía) y en segundo término, no se le hizo a nadie, basta de excusas Quinteros que a los cordobeses no, nos alcanza.
Parece que una vez más miente miente que algo quedara, si no a esta altura sería una gran cantidad de efectivos que ya estarían fuera de la policía por ser adictos a distintas sustancias, háganlo, pero de verdad y después hablamos.
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