En los últimos meses la discusión sobre la Universidad Pública esta a la orden del día, que, si es gratuita o la van a privatizar, pero en realidad hay algo mucho mas importante, que es saber si quienes salen de estas universidades en los últimos veinte años, están realmente bien preparados para ejercer.
Las Universidades públicas son financiadas en gran parte por el Estado, esto las convierte en instituciones accesibles a todos los estudiantes, estas instituciones públicas piden el pago de la matrícula, las cuales son medianamente bajas, lo que las convierte en una excelente opción para quienes quieren estudiar una carrera.
La mayoría de las universidades públicas supuestamente invierten en investigación y desarrollo, lo cual no se estaría reflejando en los profesionales que egresan de estas universidades, quizás debido a que en estos últimos años quienes asisten a estas instituciones, solo les interesa hacer política más que aprender y preocuparse por salir altamente capacitados.
Cabe destacar que es importante que alguien lo diga, por la cantidad obscena de muertes por mala praxis que se vienen dando, si bien no es solo los malos médicos, también la inexistente salud pública y los caranchos llamados obra sociales, que han hecho de la vida de las personas un enorme y productivo negocio para ellos y los sindicatos.
Cabe señalar que a lo largo de los años los médicos han perdido la vocación y el amor al prójimo, ya no abrazan la profesión para salvar vidas, por mas que lo quieran disfrazar, en la época del covid quedo en evidencia no solo la falta de humanidad con los enfermos y familiares y hoy se vuelve a repetir con el dengue, ya hay una larga lista de fallecidos, por falta de atención, pero aún más preocupante, por no estar preparados para un diagnostico que ellos mejor que nadie saben que puede ser la diferencia en entre la vida y la muerte.
Esta semana por todo lo antes expuesto, y por una nueva mala praxis y diría hasta desconocimiento, dejaron morir una madre, una esposa, una hija, una hermana, el martes próximo pasado fue internada con dengue, el jueves según ellos ya estaba bien y le dan el alta, el viernes se descompensa la vuelven a llevar y manifiestan está bien, le ponen dos sueros y la vuelven a mandar a su casa, el sábado cuando su cuerpo ya no aguanto más, al ya no responderle intentan llevarla nuevamente pero ya no resistió y falleció en los brazos de su esposo.
Estas cosas pasan cuando la salud no se toma en serio, cuando aquellos que se recibieron, pasaron por la facultad más preocupados por la política que por aprender a ser médicos, hoy no puedo ser políticamente correcta, quizás el dolor hace que no pueda callarme ante tanta decidía, todos son responsable que ninguno le saque el cuerpo, que se hagan cargo, los que se recibieron para hacerse los médicos y salvar vida, las pésimas obras sociales que son solo negociados y el mayor responsable el estado que te desangra con impuesto pero jamás vuelve en beneficio para el contribuyente, a quien le quepa el sayo que se lo ponga.